¿Qué dice la NOM-034-SCT2-2022 sobre los reductores de velocidad?
La normativa se enfoca en garantizar que los reductores de velocidad se utilicen de manera eficiente y segura, evitando problemas como accidentes por frenados bruscos o daños vehiculares. Los puntos clave incluyen:
1. Ubicación adecuada
Los reductores de velocidad deben instalarse en zonas donde se justifique su uso, como:
- Áreas escolares, hospitales o zonas residenciales.
- Cruces peatonales con alto flujo de personas.
- Tramos donde se requiera moderar la velocidad para prevenir accidentes.
Prohibiciones:
No deben colocarse en vías primarias, carreteras de alta velocidad o sin señalización previa que advierta su presencia.
2. Tipos de reductores permitidos
La normativa establece los siguientes tipos de reductores de velocidad:
- Topes: Elevaciones transversales al pavimento con una altura máxima de 12 cm y ancho de 30-60 cm.
- Rampas de desaceleración: Diseñadas para reducir gradualmente la velocidad en vialidades con mayor flujo vehicular.
- Vibradores: Pequeñas ondulaciones o franjas sonoras que alertan al conductor de manera más sutil.
3. Especificaciones técnicas
Las dimensiones, materiales y otras características deben cumplir con los siguientes criterios:
- Material: Fabricados con concreto, asfalto o hule vulcanizado, resistentes al clima y al desgaste.
- Altura y ancho:
- Topes: Entre 5 y 12 cm de altura y un ancho que garantice una transición suave.
- Vibradores: Altura máxima de 2 cm, distribuidos en patrones regulares.
- Color y visibilidad:
- Pintura amarilla o blanca reflectante que cumpla con los estándares de reflectividad de la SCT.
- Uso de materiales foto luminiscentes en áreas de baja iluminación.
4. Señalización previa
Es obligatorio instalar señalización vertical y horizontal antes de cada reductor de velocidad. La señalización debe incluir:
- Señales de advertencia como la Señalamiento Preventivo (SP), indicando la presencia de un tope o vibrador.
- Líneas transversales o flechas pintadas en el pavimento con materiales reflectantes.
Procedimientos para la instalación
- Estudio de factibilidad:
Antes de instalar cualquier dispositivo, se debe realizar un análisis técnico que evalúe:- El flujo vehicular.
- La incidencia de accidentes en la zona.
- La percepción de los peatones y usuarios locales.
- Diseño e implementación:
- Diseñar el reductor de acuerdo con las especificaciones establecidas.
- Asegurar que las rampas sean uniformes y no presenten bordes irregulares que dañen vehículos.
- Supervisión y mantenimiento:
- Realizar inspecciones periódicas para verificar el estado del reductor y su señalización.
- Repintar las líneas y colores reflectantes cada seis meses o cuando sea necesario.
Beneficios de cumplir con la normativa
- Reducción de accidentes: Dispositivos bien diseñados y colocados obligan a los conductores a manejar con precaución.
- Durabilidad y menor costo: El uso de materiales y diseños adecuados asegura una mayor vida útil, reduciendo costos de mantenimiento.
- Evitar sanciones: Cumplir con las normas evita multas y problemas legales.
Errores comunes que deben evitarse
- Instalar reductores en vías de alta velocidad, donde están prohibidos.
- Colocar dispositivos sin señalización previa, lo que aumenta el riesgo de accidentes.
- Usar materiales de baja calidad que se deterioren rápidamente.
Conclusión
La instalación de reductores de velocidad bajo las especificaciones de la NOM-034-SCT2-2022 no solo es una obligación legal, sino también una medida clave para mejorar la seguridad vial. Al seguir estas normativas, se protege tanto a conductores como a peatones, garantizando un tránsito más ordenado y seguro.
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